Las familias irlandesas que participan en este programa se caracterizan por su especial grado de compromiso y disponibilidad ante el joven participante y tendrán al menos un hijo/a de edad similar al participante.

Los jóvenes no asisten a clases, por lo tanto el aprendizaje tiene lugar a través de la integración en la forma de vida de la familia anfitriona, como un miembro más de la misma, con sus obligaciones y disciplina familiar, aportando al mismo tiempo aspectos culturales diferentes, siempre beneficiosos en la relación de personas de diferentes procedencias.

Para una mejor adaptación y mejor desarrollo de este programa es aconsejable que los participantes hayan disfrutado anteriormente de alguna estancia lingüística en un país extranjero, tengan un aceptable nivel de inglés, sean independientes, comunicativos y tengan verdadero interés en convivir con una familia irlandesa.

Cuidamos de nuestros estudiantes 24 horas al día.La diversión no está reñida con la tranquilidad, por eso la seguridad es la prioridad de nuestra organización. Contamos con supervisores locales y un teléfono al que los estudiantes pueden llamar en cualquier momento del día o la noche.